Museo del Deporte

Cuando un amante del deporte, ya sea de uno en específico o en general, empieza a coleccionar todo tipo de artículos relacionados con su pasión, siempre se imagina cómo lucirían por las paredes de su casa, en estanterías, etc... Al fin y al cabo, quiere compartir esa afición con la gente, mostrar al mundo lo que guardan sus armarios. Esto, de uno u otro modo, es lo que intento hacer yo (con algo de tiempo entre publicación y publicación xD) con este blog.

¿Y adónde quiero llegar con esto? Que al igual que disfrutas con tu colección, también disfrutas el ver las de otras personas, y la que vi hace un par de semanas en Valladolid es el ejemplo perfecto de lo que sería mi sueño. Hablo del Museo del Deporte, alojado en esa estructura semiesférica que llamamos Cúpula del Milenio.

Un sueño. Eso es lo que fui repitiendo según veía esta magnífica exposición. Qué maravilloso es el deporte, en todas sus formas, que nos hace evocar recuerdos felices, homenajear a grandes atletas y, sobre todo, disfrutar.

El fútbol es el deporte rey, no lo vamos a negar, y la mayoría de los tesoros que componen esta maravilla pertenecen a él, al igual que pase en este blog.

Grandes gestas conseguidas, tanto a nivel de club (LA UNDÉCIMA!!!) como a nivel nacional. Cada camiseta, cada balón, cada bota guarda en sus costuras una historia, y si me pusiese a contar las de todas y cada una que se congregan aquí, no acabaría nunca. Pero eso sí, disfrutaría mucho.

Y alguna vez lo he dicho, no solo de fútbol vive el hombre. Pues claro que no, cada cual prefiere uno u otro deporte, pero eso no significa que algunos tengan más prestigio o menos. En todos hay gestas, grandes historias, historias, por ejemplo, de gigantes, españoles y americanos (entre otros), que pelean sobre el parquet durante cuatro cuartos.

Y la cosa no acaba aquí, otros guerreros se batían codo con codo, escalando la montaña más alta con su fiel amiga de dos ruedas...

O recorriendo verdes praderas para finalmente vestir una americana del mismo color...

Alzándose en el cielo evitando todos los obstáculos para llegar a lo más alto...

Recorriendo largos caminos oscuros, llenos de curvas, llevando algo de rojo, azul y amarillo al oscuro asfalto....

Pero eso sí, siempre como caballeros, y compartiendo unas cervezas después de cada batalla...

En resumen, aquí podemos ver historia, guerra, amistad, esfuerzo, gestas... Todo ello con recuerdos de quien las ha protagonizado. Esto es una pequeñísima muestra de lo que se puede ver, así que recomiendo encarecidamente verlo en persona. Lo sigo diciendo, esto ha sido como vivir un sueño.

Gracias, Museo del Deporte